Para muchas civilizaciones los acites poseen un significativo carácter religioso, siempre que estén preparados respetando un determinado procedimiento ritual y que se utilicen en forma adecuada.
    Lo cierto es que se ha comprobado que los poderes terapéuticos de ciertas hierbas, se potencian al traspasarse a sustancias oleosas. Los aceites esenciales son muy efectivos para tratar diversas afecciones corporales y mejorar el estado psíquico en general.
    Al aplicarse con masajes, los aceites esenciales, son incorporados lentamente al organismo. Al mismo tiempo que la esencia penetra en el cuerpo, su aroma es captado por nuestro olfato y transmitido a nuestro centro de funciones vitales.
    Usted puede adquirir en farmacias homeopáticas y herboristerías las esencias oleosas o aprender a prepararlas usted mismo.
    Elija en primer lugar el aceite de elaboración.
 

ACEITE DE OLIVA                                                  TRABAJOS ESPIRITUALES

ACEITE DE MANÍ                                                     RITOS MEDICINALES

ACEITE DE ALMENDRA                                       HECHIZOS DE AMOR

ACEITE DE GIRASOL                                            CURACIONES Y
                                                                                          PROTECCIÓN

ACEITE DE GERMEN DE TRIGO                     PURIFICACIONES
 

  Coloque en un frasco de vidrio el aceite elegido (por lo menos, medio vaso) y una buena cantidad de las hierbas trituradas, pétalos o trozos de madera, que seleccionará de acuerdo con las propiedades benéficas que aquí le presentamos. Transcurrido un mes, cuele la preparación con un filtro de tela y guarde el aceite en un frasco de boca ancha. Consérvelo en un sitio fresco y oscuro.

ALBAHACA:

    Combate la depresión, la fatiga mental y las náuseas del embarazo.

CANELA:

    Ayuda al sistema inmunológico  a combatir dolencias infecciosas y enfermedades congénitas. Estimula el apetito.

CEDRO:

   Ataca las enfermedades de las vías respiratorias.

CIPRES:

    Es recomendado en casos de neuralgias y acné.

CLAVO DE OLOR:

    Previene la caída del cabello y el mal aliento.

ENEBRO:

    Previene la retención de líquidos y el reumatismo.

EUCALIPTO:

    Alivia a los asmáticos. Descongestiona las vías respiratorias y alivia la tos.

GERANIO:

    Estimula la correcta circulación sanguínea, calma el dolor de cabeza y cura las heridas leves.

LAUREL:

    Combate gripes y resfríos. Descongestiona.

LAVANDA:

    Combate problemas nerviosos, cicatriza quemaduras y cura el acné.

LIMON:

    Alivia dolores reumáticos y gotosos.

MANZANILLA:

    Acelera la digestión lenta y cura el insomnio.

MENTA:

    Alivia el dolor de cabeza, la tos y la fatiga.

INCIENSO:

    Favorece la cicatrización de heridas.

PATCHULI:

    Ayuda a mejorar problemas cutáneos.

PINO:

    Previene infecciones, fatiga mental y casos leves de reumatismos.

ROMERO:

    Ayuda a relajar los músculos contracturados.

ROSA:

    Estimula el deseo sexual, calma las náuseas y el dolor de cabeza.

SALVIA:

    Alivia los trastornos de la menopausia y evita la baja presión.

SANDALO:

    Es buen complemento en la curación de infecciones en las vías urinarias y combate la impotencia masculina.

TOMILLO:

    Cura infecciones intestinales. Combate los parásitos.
 
 

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